Nos encantan las carpas Nemo por su diseño y la altísima calidad de sus materiales. Resistentes e innovadores, sus productos están presentes en miles de tiendas especializadas alrededor del mundo. Y su historia no deja a nadie indiferente, pues en solo 15 años la compañía ha logrado posicionarse como un competidor a nivel internacional, luego de partir como una humilde empresa de New Hampshire. Aquí te contamos cómo fue su ascenso.

La historia de Nemo comienza el 24 de abril de 2002, creada por Cam Bresinger con la intención de hacer productos de diseño e ingeniería de alta calidad. Sólo dos meses después, cuando Cam se gradúa, Nemo se traslada a Nashua, en New Hampshire, Estados Unidos. Se trata de un lugar estratégico por su cercanía a las Montañas Blancas de New Hampshire, y a los contactos que la compañía tenía con el MIT y el RISD.

El taller donde empezó la historia de Nemo

Gran parte del primer año se gastó en desarrollar la tecnología patentada de Nemo Air Supported. Se eligieron las carpas como primera línea de productos pues Cam vió la oportunidad de llevar al mercado una significativa innovación, que terminó revolucionando el mundo de las carpas y permitió darle a Nemo la credibilidad para crecer y seguir desarrollando nuevos productos.

En 2003 se completaron los primeros prototipos de AirSupported. Así, Nemo comenzó a desarrollar una nueva línea de tiendas de campaña y contrató a sus primeros empleados. Además, se empezó a hacer consultorías especializadas para estimular la creatividad y ampliar la experiencia de los empleados.

Uno de los primeros prototipos de la tecnología AirSupported de Nemo

En 2004 se estrenaron oficialmente las primeras carpas con tecnología AirSupported para condiciones climáticas extremas en el Summer Market Outdoor Retailer,  en Utah.  Las carpas fueron un éxito, y lograron captar la atención de diversos medios, siendo la compañía destacada entre lo mejor del encuentro. Allí, varias marcas se asociaron con Nemo para crear nuevos productos, entre ellas Nike.

Ya para 2006, las ventas se empiezan a expandir por todo Estados Unidos, continuando con modelos como la Morpho AR, Tenshi y Gogo. Las inversiones de muchas personas sirvieron para formar un equipo de diseñadores e ingenieros que con un laboratorio para el diseño de carpas crearon una red de contactos con las mejores marcas textiles y de componentes en la industria.

En 2008 Nemo puso en la punta de su lista de prioridades a la sustentabilidad, y creó  el programa GRN (Green Rethinking by Nemo). Así, en el verano de ese año Nemo debutó con la primera carpa casi 100% hecha con materiales reciclados, y con varillas hechas de bambú. El staff de la compañía fue creciendo, integrando puestos dedicados para marketing, ventas, serivicio al consumidor y diseño gráfico.

Equipo de diseño en las oficinas de Nemo Equipment

Durante 2010, la compañía contaba con 20 modelos de carpas, y sus ventas en Europa, Canadá y Japón crecían cada vez más.  Nemo creó un programa para donar US$2 por cada venta y donar lo recaudado a 5 organizaciones sin fines de lucro. Además, se donaron más de US$30000 en carpas y otros productos para los afectados por el terremoto en Haití.  Así, la compañía sigue creciendo y colaborando con distintas fundaciones a lo largo y ancho del mundo.

Cuando en 2011 la compañía se trasladó a su nueva ubicación en Donver, New Hampshire, las ventas y desarrollos de la compañía empezaron a crecer aún más rápido. Se incluyó nuevos clientes del área militar y de supervivencia, y una enorme cantidad de productos nuevos han sido creados.

Las oficinas de Nemo en Donver

Nemo ha seguido creando nuevas tecnologías y ha sido premiada en innumerables ocasiones, destacando entre ellas la de GearJunkie como lo mejor del año en 2013, y el Gear of the Year en 2016. Sin duda, una historia impresionante de dedicación e innovación. Puedes ver todos nuestros productos Nemo Equipment aquí!

Fuente: NemoEquipment.com